El juez Arthur Engoron
desautorizó a Donald Trump de participar en el día final de presentación de
alegatos porque no se quiso ceñir a la exigencia de “comentar sobre temas
irrelevantes” ni “dar un discurso de campaña”. El caso podría significar para
el expresidente grandes multas y la posibilidad de que no pueda hacer más
negocios en Nueva York.
El juicio civil por fraude
contra Donald Trump que estuvo en curso en las últimas semanas ante un tribunal
de Nueva York termina este lunes con la sesión de presentación de los alegatos
finales.
En esta sesión el expresidente
no podrá exponer personalmente sus argumentos, porque no quiso acatar la orden
del juez de "ceñirse a temas relevantes" y no dar un discurso de
campaña, como suele hacer cuando ha testificado.
El juicio podría costarle a
Trump más de $300 millones y una prohibición de hacer negocios en el estado de
Nueva York, que es lo que pide la fiscalía.
La fiscal general del estado,
Letitia James, acusa al expresidente de inflar su patrimonio neto en miles de
millones de dólares con el propósito de lograr condiciones blandas para
préstamos y pólizas de seguro.
El juez Arthur Engoron ya
determinó antes del juicio que Trump y otros acusados perpetraron fraude. El
mismo magistrado le quitó a Trump el control de algunas propiedades, pero esa
decisión fue puesta en pausa por una corte de apelaciones.
Ergoron está considerando
ahora otros seis reclamos, incluyendo alegaciones de conspiración y fraude a
aseguradoras.
Trump, quien encabeza las
encuestas para ser el candidato presidencial republicano en 2024, niega haber
cometido ilegalidad alguna y afirma que el juicio es un fraude y un ataque
político en su contra. Tanto James como el juez son demócratas.
Por qué Trump no puede
presentar personalmente sus argumentos el último día del juicio
Aunque es sumamente inusual
que alguien que cuenta con abogados presente sus propios argumentos finales,
Trump había dicho que haría la presentación personalmente, aparte de las
declaraciones de su equipo legal.
En un intercambio por email en
días recientes y registrado ante tribunales el miércoles, el juez Engoron dio
su aprobación inicial al pedido, diciendo que deseaba “dejar que todos digan lo
que tengan que decir”.
Pero añadió que Trump debería
limitar sus declaraciones al tema de los argumentos finales expuestos por sus
abogados, “los hechos materiales relevantes que se han exhibido como evidencia
y la aplicación de la ley a esos hechos”.
En concreto, Trump no podría
introducir evidencia nueva, “comentar sobre temas irrelevantes” ni “dar un
discurso de campaña”, escribió el juez. Tampoco podrá denigrar al juez, sus
asistentes, la fiscal general, sus abogados ni el sistema judicial, como lo ha
hecho en el pasado.